LeaNoticias.com - ¡Cuidado! Jamás debes preguntar estas cosas en una entrevista de trabajo - 12 noviembre, 2012
¡Cuidado! Jamás debes preguntar estas cosas en una entrevista de trabajo
Es muy probable que cuando te has tenido que enfrentar a una  entrevista de trabajo hayas sentido unas terribles ansias y en unos  cuantos segundos, te has vuelto presa del nerviosismo. Los expertos  dicen que es normal tener esas sensaciones, pues todo mundo es consiente  de la gran competitividad que existe en este mercado.
Los nervios puedes convertirse en tu mejor arma durante una  entrevista de trabajo,  hay personas que viven en ese momento tanta  presión que hace que su entrevista con el reclutador sea inusual o que  al término de esta, hagas preguntas que puedan dejarte en mal.
 
1. El giro de la empresa. Uno de los errores  garrafales que la mayoría de la gente comete es llegar a la entrevista y  preguntarle a la persona de Recursos Humanos lo que la compañía  exactamente realiza.
Si preguntas esto, denotarán falta de interés de incorporarte a dicha  empresa y por lo tanto, seguramente ni siquiera serás contemplado para  pasar el primer filtro. Así que antes de presentarte a la entrevista,  investiga por internet cuál es el giro del negocio, así como sus logros,  quién es la competencia y si por alguna razón han sido noticia en los  últimos días.
2. Sobre el salario y los beneficios que otorga la empresa. A  los encargados de entrevistar no les parece una buena carta de  presentación que el entrevistado pregunte antes que nada, cuál será su  sueldo y qué otras prestaciones ofrece la empresa.
Nadie dice que no te asegures en qué condiciones trabajarás, pero es  conveniente que esas dudas las guardes para cuando vuelvan a llamarte  para decirte que estás contemplado para ser contratado. Es en ese  momento cuando es oportuno hacer esta pregunta.
3. Cuándo se llevan a cabo encuestas de clima laboral. Quizá  lo que realmente te interese es saber si la empresa constantemente hace  evaluaciones entre sus empleados con la intención de medir su desempeño  o porque le preocupa mejorar las cosas para ser un negocio rentable y  productivo.
Sin embargo, esta pregunta puede entenderse mal y podrías dar una  imagen negativa, ya que hay quienes interpretan que dicha inquietud es  porque eres una persona a la que le gusta quejarse de su situación  laboral en cada momento y por lo tanto, no te vuelves el empleado ideal.
4. Si checarán tus antecedentes o referencias. Puede  ser que hayas hecho una excelente entrevista, así que no la eches a  perder cuestionándole al entrevistador si en realidad verificarán tu CV,  así como tus recomendaciones.
Si lo haces, lo único que generarás es que el reclutador, al que te  habías ganado por tu desempeño en la charla, comience a dudar de ti,  pues con esa pregunta, pareciera que ocultas algo perturbador de tus  anteriores experiencias laborales.
5. Trabajar desde casa. Cuando viste la vacante,  seguro que en las especificaciones de la misma venía aclarado si  tendrías que acudir a una oficina a laborar o bien, si tus tareas podías  hacerlas desde tu casa.
Así que evítate la pena de preguntar eso en la entrevista, pues  podrías hacerte una imagen de flojo y poco comprometido. Lo mejor será  que cuando ya obtengas el empleo, des lo mejor de ti y quizá tu jefe  pueda considerar el que trabajes desde casa un par de veces en el año.
6. Si tienen alguna otra plaza disponible. Es verdad  que en una entrevista de trabajo deberás ser lo más honesto posible,  así que si durante la charla con el personal de Recursos Humanos crees  que el empleo que ofrecen está por debajo o superan tus habilidades, lo  mejor será darles las gracias y evitar darle vueltas al asunto  preguntando si de casualidad no hay ninguna otra vacante que se acople a  tus características.
Puedes hacerle ver al entrevistador que estás en búsqueda de algo  mejor con frases en donde destaques tus cualidades y lo que hacías  anteriormente, sin necesidad de verte mal o cortante lanzando esta otra  pregunta prohibida.
7. Cuándo podrás cambiar de puesto. Ni se te ocurra  preguntarle esto a quien te está entrevistando, pues estás dejando en  claro que abandonarás tu empleo a la primera oportunidad de que te  llegue otra cosa, quizá algo mejor a lo que estabas esperando.
Es difícil que en menos de un año la compañía promueva un cambio de  puesto, así que deberás de ser paciente o si no, jamás te contratarán,  pues no eres el empleado comprometido que ellos están buscando.
8. Si vas a tener oficina propia. Si preguntas esto,  harás que el ambiente entre tú y el reclutador se vuelva un tanto  incómodo, pues puedes dar a entender que eres poco profesional y a que a  ti, eso de trabajar en equipo simplemente no te gusta o no se te da.
Cuestionar sobre este asunto te creará una imagen de poco profesional  y hasta cierto punto, el de ser una persona banal, que se preocupa por  cosas poco importantes y que se concentra en pequeños detalles más que  en su trabajo.
9. Si te harán exámenes clínicos. En varias  empresas, antes de que el aspirante a determinado puesto firme el  contrato de empleo, opta por realizarle diversos exámenes clínicos, con  la intención de asegurarse que la persona que contratan se encuentra  apta para realizar sus labores o bien, para tener conocimiento si sufre  de algún padecimiento.
Aquí el problema es que varios preguntan en la entrevista si deberán  ir al laboratorio a hacerse un antidoping. Esto hará pensar al  reclutador que en verdad tienes algún problema de salud o de adicciones  que no quieres que se sepan, despertando en él total desconfianza.
10. Si te fue bien en la entrevista. Supiste  controlar los nervios y te mostraste como una persona segura durante  toda la charla con el entrevistador. Todo iba viento en popa hasta que  al darle la mano para despedirte, aflora tu inseguridad al preguntarle  si lo hiciste bien.
El encargado de este procedimiento no te dirá nada en absoluto, pues  deberá analizar tu comportamiento y tus aptitudes para determinar si  eres la persona adecuada a ocupar la vacante. Aunque con este  cuestionamiento, es seguro que te rechacen, pues has mostrado  incertidumbre en tu comportamiento.